Fiel a su relación con el western, Almería cuelga hoy el cartel de «Se Busca» pero no para encontrar a los peores forajidos al oeste del rio Andarax, vivos o muertos, sino para localizar la mejor tapa que se sirve en los bares de la ciudad.
Almerienses y visitantes tendrán que encontrarla en alguno de los 37 establecimientos que se han sumado a la V Ruta «De tapas por Almería», que se desarrollará desde hoy y hasta el próximo 25 de marzo. Votarán las mejores tapas en las modalidades tradicional y gourmet, en las 22.000 cartillas que se repartirán al efecto en los bares participantes, donde también podrá señalarse al que cada uno considere el mejor camarero.
La ruta, organizada por la asociación de hosteleros de Almería (ASHAL), con el apoyo del Ayuntamiento y la Diputación Provincial, tiene dos recorridos o circuitos: De Tapas por Almería Mirando al Mar, y de Tapas por Almería Centro Ciudad.
Cada bar o restaurante propone la tapa tradicional y/o gourmet que opta a los premios. Los clientes que participen podrán conseguir consumiciones gratis y entrarán en el sorteo de tres fines de semana gratis para dos personas en hoteles de cuatro estrellas.
Además de los premios del público, concederá los suyos, también en las tres modalidades de mejor tapa tradicional, mejor tapa gourmet y mejor camarero, un jurado profesional compuesto por tres profesores de la Escuela de Hostelería, un maitre y un periodista de la Voz de Almería. Los primeros premios están dotados con un premio en metálico de 100 euros, junto a un trofeo realizado por la escultora Carmen Mudarra.
En la edición de 2011 de la Ruta, en la categoría tradicional fueron premiados el bacalao con tomate del café bar Lisboa (por el jurado) y el bocadito de solomillo ibérico con ajoblanco del restaurante Plaza de Cañas (por el público). La mejor tapa gourmet para el jurado fue un Cráter de gulas y serranito, del restaurante La Tahona, y, para el público, una carrillada ibérica con bola de arroz, de la Taberna La Bien Pagá. Los mejores camareros fueron Sergio Guzmán (crepería Torreluz), a juicio del jurado, y Antonio Ródríguez, de La Bien Pagá, según el público.