La actriz Ruth Gabriel (San Fernando, Cádiz, 1975) es conocida, sobre todo, por su papel en el largometraje de Imanol Uribe Días Contados (1994), que le procuró un Goya a la Mejor Actriz Revelación, si bien muchos de los integrantes del baby boom de los 70 todavía la recuerdan como uno de los rostros del espacio infantil Barrio Sésamo, imbatible en su época.
Hoy Ruth Gabriel sigue trabajando, sobre todo en teatro y cine, pero además de su labor como actriz esta intérprete es una gran aficionada al buen comer. En esta breve entrevista, mantenida pintxo en mano en Sandó by Arzak Instructions, uno de los restaurantes que frecuenta la actriz en Madrid, Gabriel habla, entre otras cosas, de lo importante que es ir bien acompañado si se trata de encontrar buenos establecimientos donde saciar el apetito entre función y función.
Veo que le gustan los pintxos…
Sí, pero no a mí sola; los pintxos y las tapas ya se han convertido en algo universal.
¿Cual es su plato favorito?
Pues va por días, yo considero que la comida es algo que te va llevando a vivir momentos.
¿Y cuál es el mejor momento gastronómico para Ruth Gabriel?
Bueno, a mí me encanta comer, y por eso encuentro momentos para todo. Me gusta una cena con una sobremesa larga, un cóctel en el que puedes probar varias cosas diferentes…
¿Cada vez tenemos más cultura gastronómica o vivimos una moda pasajera?
Pues lo no sé; la verdad es que yo me he rodeado de gente a la que no le gusta comer bien por moda, sino por auténtica convicción.
Los actores, en vuestro día a día, ¿comen bien o mal? Me parece que más bien debe ser lo segundo, ¿no?…
Bueno yo he tenido giras de teatro en las que he acabado agotada de tanto comer tortilla de patatas y ensaladilla rusa, y no era porque no me gustaran, es porque era lo único que comíamos. Los actores tenemos esa cosa de los titiriteros de acabar la función y llegar a casa a a las cuatro de la mañana después de haber caído en un bar donde te ofrecen la tortilla que lleva hecha desde por la mañana.
Pero seguro que también habrá veces en las que en esas giras harán grandes descubrimientos.
Bueno, pero es gracias a que hay gente que se sabe todos los restaurantes de carretera donde merece la pena parar a comer, y hay que reconocer que en España los hay geniales.
¿Por ejemplo?
Una de estas personas es mi compañera María Galiana, que sabe que en tal carretera en el kilómetro no sé cuántos se come muy bien, y no lo tiene escrito, lo lleva en la cabeza.
No Ruth, se llaman «puticlubs», y lo que haces allí no está bien visto en la sociedad de bien….
Y lo tuyo Xavier, se llama ser imbécil.
Estoy de acuerdo, Jorge: No suelo dejar comentarios, pero esta chica, muy profesional y muy correcta en su entrevista, no se merece comentarios tan ignominiosos como el de este tal Xavier, quien seguramente será un misógino aburrido cuya escasa masa cerebral funciona a través de sus genitales.