El consumo de alimentos que contienen incluso una pequeña cantidad de nicotina, como pimientos y tomates, pueden reducir el riesgo de desarrollar Parkinson, según una nueva investigación publicada este jueves en ‘Annals of Neurology’. El estudio revela que las solanáceas, una familia de plantas florales con algunas especies productoras de alimentos que son fuentes comestibles de nicotina, pueden proporcionar un efecto protector contra esta enfermedad.
La enfermedad de Parkinson es un trastorno del movimiento causado por una pérdida de células cerebrales que producen dopamina, con síntomas de temblores que afectan a cara, manos, brazos, piernas y rigidez en las extremidades, pérdida del equilibrio y movimiento en general más lento. Hasta diez millones de personas en todo el mundo viven con esta enfermedad, según la Fundación de la Enfermedad de Parkinson, y, actualmente, no hay cura, pero los síntomas se tratan con medicamentos y procedimientos como la estimulación cerebral profunda.
Estudios previos han encontrado que el consumo de cigarrillos y otras formas de tabaco, también una planta de solanáceas, reudcen el riesgo relativo de la enfermedad de Parkinson, pero no se ha confirmado si los componentes de la nicotina u otro tipo en el tabaco proporcionan un efecto protector o si las personas que padecen Parkinson son simplemente menos propensas a consumir tabaco por las diferencias que se producen en una fase temprana de la enfermedad en el cerebro, incluso antes del diagnóstico.
Para este estudio, la doctora Susan Searles Nielsen y sus colegas, de la Universidad de Washington, en Seattle (Estados Unidos), reclutaron a 490 pacientes con diagnóstico reciente de Parkinson en la Clínica de Neurología de la Universidad o mediante una organización regional de mantenimiento de la salud, Group Health Cooperative, además de usar otros 644 individuos no relacionados sin condiciones neurológicas como controles.
Los investigadores utilizaron cuestionarios para evaluar la dieta durante toda la vida de los participantes, así como su consumo de tabaco. El consumo de verduras en general no afectó al riesgo de la enfermedad de Parkinson, pero el aumento de la ingesta de las solanáceas comestibles redujo el riesgo de la enfermedad de Parkinson, siendo los pimientos los que mostraron la asociación más fuerte. Los autores de la investigación señalaron que se produjo una aparente protección contra el Parkinson principalmente en los hombres y las mujeres con poco o ningún uso previo de tabaco, que contiene más nicotina que los alimentos estudiados.
«Nuestro estudio es el primero en investigar la nicotina de la dieta y el riesgo de desarrollar la enfermedad de Parkinson –resaltó Searles Nielsen–. Al igual que los numerosos análisis que indican que el consumo de tabaco puede reducir el riesgo de Parkinson, nuestros resultados también sugieren un efecto protector de la nicotina, o tal vez una sustancia química similar pero menos tóxica en el pimiento y el tabaco«. Los autores recomiendan realizar más estudios para confirmar y extender sus conclusiones, que podrían dar lugar a posibles intervenciones de prevención contra el Parkinson.